La IoT y la industria del futuro
15 de octubre de 2021
15 de octubre de 2021
La industria del futuro, también llamada industria 4.0, corresponde a la transformación de la industria, iniciada por la cuarta revolución industrial. Se basa en modelos de fábrica ultraconectados y automatizados, que permiten satisfacer las necesidades de personalización de los clientes. El reto de esta nueva industria es mantener bajos los costes de producción, incluso con pequeños volúmenes de producción.
El principal impulsor de esta revolución industrial es el IoT (Internet de los objetos), que permitirá la conexión total de los equipos de las fábricas en los próximos años, así como la recopilación y el análisis completos de datos para pasar a modelos de producción y logística predictivos.
En el contexto de la industria, hablamos de IIOT (Industrial Internet of Things). Esta tecnología permite la conexión y comunicación de diferentes partes de las cadenas de producción y logística. Los equipos IIOT integran sensores y herramientas de comunicación que generan datos sobre su funcionamiento.
La recogida de datos de los equipos IIOT unida al uso de la inteligencia artificial permite un análisis y explotación de los datos óptimos. Esto representa importantes ganancias en productividad, seguridad y control de calidad para las empresas, con el fin de seguir siendo cada vez más competitivas.
El IIOT permite evolucionar hacia un modelo predictivo en todos los procesos logísticos y de producción. Esta tecnología también permite la evolución de los modelos de mantenimiento de equipos: ahora es posible anticipar averías y fallos en las distintas máquinas, pero también medir su impacto en la gestión de inventarios, los ciclos de producción o el desgaste de las máquinas.
El acoplamiento de la IIOT con la robótica permite disponer de máquinas cada vez más autónomas en los procesos de producción y logística: pueden realizar más tareas para ayudar a los operarios, y algunas máquinas pueden incluso tomar decisiones. Los equipos inteligentes no sólo permiten a los operarios realizar tareas más complejas haciendo que los robots les ayuden en tareas sencillas, sino que también aumentan la seguridad de los trabajadores de almacén. Las máquinas están ahora equipadas con sensores que pueden detectar anomalías en su funcionamiento o incluso una presencia inusual que podría ser peligrosa. Entonces detienen o ralentizan su proceso de forma autónoma y señalan el peligro al resto de operarios emitiendo una alerta de seguridad.
La ayuda de la inteligencia artificial (IA) en la anticipación y detección de anomalías más rápidas permite una reducción de costes en los ciclos de producción y las cadenas de suministro, lo que supone una ventaja real para las empresas.
El IIOT, sumado a la IA y el big data, representa la agrupación perfecta de tecnologías para la Industria 4.0 : estas tres tecnologías permiten fábricas hiperconectadas e interconectadas y almacenes mediante el uso de sensores inteligentes capaces de enrutar datos a diversos dispositivos para su mejor análisis y uso.
La IIOT en la industria del futuro tiene múltiples casos de uso, tanto en la fábrica como en el almacén.
La interconexión de los equipos IIOT permite flujos de información en tiempo real, casi inmediatos, de modo que las anomalías que puedan producirse pueden analizarse con mayor rapidez. Al ser conscientes de los fallos de los equipos casi inmediatamente cuando se producen, es posible por tanto eliminarlos rápidamente, para limitar el impacto en las actividades de producción.
Las empresas que utilizan IIOT en sus plantas están observando una mejora significativa de la producción porque consiguen una mejor supervisión y seguimiento de sus equipos mediante análisis en tiempo real.
Como se ha mencionado anteriormente en este artículo, IIOT e IOT en general han traído un nuevo modelo de gestión del mantenimiento. Ahora es posible obtener el estado en tiempo real de diferentes máquinas equipadas con sensores que envían datos de vuelta para su análisis. El análisis constante de estos datos de funcionamiento facilita la predicción de un próximo problema o fallo, permitiendo intervenciones más rápidas y eficientes gracias a las alertas enviadas.
Al tratar el problema en cuanto se produce (o incluso antes), el tiempo de inactividad de los equipos se reduce considerablemente, lo que disminuye los daños que podría sufrir la empresa.
Reunir información precisa sobre el estado de sus existencias le permite aplicar nuevos procedimientos para almacenar sus productos. Usted optimiza todas sus operaciones de gestión de existencias con la ayuda de un software que le ayuda en la realización de sus inventarios, sus reposiciones. Incluso es posible automatizar estas operaciones: en caso de falta de existencias, recibirá una alerta que le permitirá proceder a la reposición de este producto de forma automática.
La inteligencia artificial también le permite automatizar la automatización doméstica de sus almacenes para mejorar las condiciones de almacenamiento de sus productos. Así, sus dispositivos pueden basarse en análisis en tiempo real para ajustar diferentes parámetros como la temperatura, la ventilación o incluso la luminosidad con el fin de limitar las pérdidas relacionadas con los residuos y optimizar los costes de funcionamiento de sus almacenes..
La integración de sensores en sus distintos equipos permite una supervisión autónoma de su funcionamiento, pero también la implantación de sistemas más reactivos en caso de problemas, con el fin de anticipar y prevenir mejor los riesgos de accidente.
De este modo, los procedimientos de emergencia pueden activarse de forma autónoma en cuanto los dispositivos detectan una actividad anormal que podría suponer un peligro para la infraestructura, pero también para los operadores de las cadenas de producción y logística.
La IIOT y la IOT en un caso más general son, por tanto, motores de la mejora de fábricas y almacenes. Permiten implantar equipos interconectados que, vinculados a distintos programas informáticos y gracias a la inteligencia artificial, pueden optimizar los distintos procesos mejorando su calidad, seguridad y productividad.
Con la aparición de cada vez más objetos conectados en los próximos años, las fábricas y los almacenes también estarán cada vez más conectados, lo que representará una importante ganancia para las empresas que quieran seguir siendo cada vez más competitivas.
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