Guía para la automatización de almacenes

Una empresa que desee aumentar su productividad logística, optimizar su área de almacenamiento y mejorar la seguridad de sus operarios y mercancías puede automatizar sus almacenes.

¿Cuándo debe automatizarse un almacén?

La gestión manual de almacenes y el control de inventarios implican un alto riesgo de error. Para limitar los costes operativos y garantizar un servicio logístico eficaz, es esencial controlar el rendimiento de las operaciones. Es necesario automatizar parte o la totalidad del almacén cuando las pérdidas de existencias son frecuentes o el número de pedidos erróneos es elevado.

En 2026, el mercado de soluciones logísticas automatizadas superará los 30.000 millones de dólares, con un crecimiento anual superior al 14%, según un estudio de la consultora LogisticsIQ.

Accionamientos de automatización:

• Productividad,
• Eficiencia,
• Seguridad en el almacén.

Primer paso: el estudio de viabilidad. Qué operaciones deben automatizarse?

La automatización parcial de un almacén es una práctica habitual para operaciones o puestos de trabajo en los que el responsable de logística identifica un potencial aumento de la productividad y una reducción de errores.

Para que la automatización sea completa, los flujos deben ser constantes y repetitivos. Solo las soluciones automatizadas permiten un flujo de trabajo continuo en almacenes con condiciones más extremas, como los refrigerados o aquellos con bajos niveles de oxígeno.

Las operaciones más susceptibles de ser automatizadas son aquellas en las que el riesgo de error por gestión manual es mayor:

• Manipulación de cargas,
• Recogida de pedidos,
• Trasladar mercancías o extraerlas,
• Depositar en estanterías.

Para garantizar una aplicación adecuada y una propuesta que satisfaga las necesidades del cliente, el proveedor de soluciones logísticas realiza un estudio de viabilidad.

A partir de este documento, se elabora una oferta en la que se especifican las soluciones automáticas diseñadas para aumentar la productividad, seguridad y eficiencia de la instalación. Se tienen en cuenta otras variables como la rentabilidad y el retorno de la inversión para el cliente. Por tanto, la solución debe estar siempre en consonancia con los requisitos y medios del cliente.

Paso 2: Implantación del software de gestión de almacenes

Para automatizar un almacén es necesario implantar un software de gestión de almacenes (SGA) que coordine el funcionamiento de toda la instalación.

El software se convierte en el piloto de la instalación que asigna a cada producto una ubicación en función de criterios y reglas predefinidas por el responsable logístico. Además, el control digital del almacén garantiza la trazabilidad de todas las operaciones.

Un SGA es la solución ideal para lograr un mejor rendimiento en la fase de preparación de pedidos. Permite sincronizar ayudas al picking como el picking por voz o el pick-to-light con terminales de radiofrecuencia que se transmitirán a los operarios con instrucciones detalladas para simplificar su trabajo y evitar errores.

El software de gestión de almacenes es una herramienta para automatizar la toma de decisiones y la coordinación de las operaciones. A través de un sistema de control de almacenes (WCS), el software de gestión sincroniza las acciones de todos los elementos automáticos.

Paso 3: Instalación de sistemas de almacenamiento

En el mercado existen soluciones de almacenamiento automatizado que ofrecen diferentes niveles de complejidad, adaptados a las necesidades del cliente. Muchas empresas empiezan con la automatización complementando la digitalización de sus almacenes con un sistema de almacenamiento semiautomático.

• Los almacenes con un mayor volumen de carga pueden automatizar la recuperación y el almacenamiento de mercancías, sustituyendo las carretillas elevadoras y las transpaletas por transelevadores automáticos trilaterales. A diferencia de los transelevadores convencionales, estos robots de almacenamiento no requieren un bastidor aéreo, lo que facilita su instalación en cualquier almacén.
• En almacenes con un flujo constante y repetitivo de mercancías, una solución de automatización habitual es la instalación de cintas transportadoras u otros sistemas de transporte automatizados tanto para palés como para cajas, como elevadores de palés, sistemas monorraíl, etc., para sustituir a los equipos de manipulación manual.

Cuando la automatización abarca todos los pasos intralogísticos (transporte interno, recuperación/depósito de palés y toma de decisiones mediante software), el almacén está totalmente automatizado.